Los Tecuanes de Acatlán preservan la tradición de la muerte del Jaguar cada 2 de noviembre.
Los Tecuanes del municipio de Acatlán continúan con la tradición de reunirse cada 2 de noviembre por la tarde en la explanada de los panteones municipales.
Este año, más de 10 cuadrillas de danzantes, todas originarias de Acatlán, se congregaron para rendir homenaje a los fieles difuntos y preservar una tradición que lleva más de 100 años en práctica.
Efraín Castelán, coordinador de la danza de tecuanes, comentó que investigaciones indican que la danza de tecuanes se introdujo en 1890, lo que llevó a la realización de estas reuniones cada 2 de noviembre en la explanada del panteón municipal.
Cada año, se escenifica la muerte del jaguar en este lugar, con una agrupación diferente encargándose de la representación; en 2024, le correspondió a la cuadrilla de Nsikaá Davi, bajo la dirección de Tonchis Márquez.
Castelán destacó que, según las investigaciones, existe un ciclo del jaguar que inicia en Acatlán, Guerrero, y concluye en Acatlán de Osorio, Puebla, coincidiendo con la cosecha de temporada. Esta reunión de Tecuanes es una forma de honrar a los muertos que se despiden cada 2 de noviembre.
Álvaro Cruz, secretario general del ayuntamiento, mencionó que las danzas de tecuanes siempre están en constante preparación para presentarse en cualquier lugar y han renovado su vestimenta.
El interés por los Tecuanes ha crecido, con más de 20 danzas tecuanes en la cabecera municipal de Acatlán. Además, en el municipio se fabrican máscaras y vestuarios, lo que representa un orgullo para la comunidad.
Cabe destacar que muchas personas se reunieron para observar a los danzantes en la explanada de los panteones municipales, algunos rindiendo homenaje al monumento del Tecuan antes de hacer lo mismo en la entrada de los panteones.
La escenificación de la muerte del jaguar tiene lugar en la explanada del panteón municipal y se realiza una vez al año.
