Donald Trump es declarado ganador de las elecciones presidenciales en EE.UU.
Donald Trump regresa a la presidencia tras imponerse claramente sobre Kamala Harris, marcando su retorno a la Casa Blanca después de cuatro años. El 20 de enero asumirá como el 47º presidente de EE.UU., retomando el poder que perdió en 2020, un hecho que solo había ocurrido una vez antes en la historia. Apelando al descontento por la inflación y la inmigración irregular, y con una campaña que repitió el discurso xenófobo de 2016, Trump superó los obstáculos judiciales y, a pesar de su historial, se ha ganado nuevamente el apoyo popular. Su victoria ha sido contundente, especialmente en el Colegio Electoral, y supone un cambio radical que sacude al país y al mundo.
Celebró su victoria en West Palm Beach con sus aliados, incluido su futuro vicepresidente J.D. Vance. En su discurso, prometió una «edad de oro» para Estados Unidos y “sanar” el país. Declaró que su triunfo es una «victoria histórica» y prometió arreglar los problemas nacionales.
Superando los 270 votos del Colegio Electoral con triunfos en varios estados clave, Trump consiguió el respaldo necesario para asegurarse la presidencia, lo que supone una derrota crítica para los demócratas, que pierden el Senado. En respuesta al descontento económico, Trump propone aranceles y medidas aislacionistas, que podrían tensar las relaciones comerciales internacionales. Ha prometido además indultos a los participantes del asalto al Capitolio y endurecer la política migratoria.
Su victoria representa un cambio en la política exterior de EE.UU., en donde una menor participación en conflictos internacionales y un menor compromiso con la OTAN podrían alterar el equilibrio global. La UE ha preparado medidas en caso de una disminución de ayuda a Ucrania y un posible conflicto comercial. Además, Trump planea reducir las políticas de lucha contra el cambio climático, inclinando las prioridades del país hacia intereses internos.